En el día de hoy, nuestro colectivo ha propuesto al edil Héctor Díez, concejal de Limpieza Urbana, Palmeral, Mantenimiento Espacios Públicos, Parques y Jardines y Contratación Pública de Elche como candidato a los premios “Atila”, premios que la organización ecologista estatal convoca todos los años coincidiendo con el 5 de junio, día mundial del medio ambiente.
https://www.ecologistasenaccion.org/participa/premios-atila/ .
Con esta irónica nominación, desde Margalló queremos que se reconozca su innegable contribución a la destrucción del medio ambiente de nuestra localidad, un ejemplo para otras localidades de nuestro país.
Desde Margalló destacamos la responsabilidad del edil a lo largo de los últimos seis años en materia de gestión de residuos. Sin el protagonismo del edil no hubiera sido posible aprobar una contrata de basuras tan nefasta como la que vamos a padecer los próximos diez años, la más cara en la historia del municipio, realizada a medida de la empresa concesionaria sin planificación de ningún tipo ni proyecto que garantice la consecución de los objetivos ambientales establecidos por la legislación vigente. También en relación a la gestión de residuos, recordamos el apoyo del edil a la gestión que realiza el Consorcio de Residuos del Baix Vinalopó, apoyo fundamental ya que Elche ostenta más del cincuenta por ciento de la representatividad en el consejo de administración de dicho Consorcio. La connivencia de Héctor Díez con todo lo que tenga que ver con el Consorcio ha hecho posible que la montaña de basura del vertedero de Els Cremats siga creciendo a un excelente ritmo, gracias al mérito de ser el Consorcio con peores datos de recuperación y reciclaje de toda la provincia.
Por otro lado, también queremos se recuerde la cruzada que el edil ha emprendido para eliminar todo atisbo de vegetación que pueda crecer en los espacios que gestiona. Al igual que el caudillo huno, donde Héctor Díez manda, no vuelve a crecer la hierba. Y para ello, al Sr. Díez no le tiembla la mano a la hora de hormigonar parterres, rotondas y medianeras de las principales vías urbanas de nuestro municipio, impermeabilizando más y más superficie pese a las voces en contra de expertos y a las recomendaciones de otras administraciones, como la autonómica. Y no sólo eso, tampoco le falta arrojo para ordenar la utilización indiscriminada de un polémico herbicida bajo sospecha de ser cancerígeno, el glifosato, para acabar con cualquier pequeña hierba o flor que se atreva a crecer en nuestros parques, jardines y huertos de palmeras, da igual que se encuentren pegados a centros escolares o cercanos a espacios transitados. Sin duda, al Sr. Díez este premio al que le nominamos le viene como anillo al dedo.