Dar a conocer el sistema tradicional de riego en los huertos de palmeras ilicitanos en uno de los espacios emblemáticos por excelencia, y también de los más visitados, como es el Parque Municipal, fue uno de los principales objetivos que se fijó el equipo de gobierno hace ahora año y medio. Por eso, aprovechando las obras de remodelación del Paseo de la Estación, apostó por ampliar el Parque Municipal y dejar al descubierto el tramo de la acequia de Candalix. Ahora, a unas semanas vista desde que los trabajos comenzaron, la infraestructura de origen árabe ha salido a la luz. La singularidad, no obstante, no viene dada únicamente por el descubrimiento en sí, sino también por el hecho de que ha aparecido un “tallamar” de piedra que divide el caudal, pese a que lo habitual es que sean de madera, según precisa el edil de Patrimonio Cultural, Pablo Ruz.
El concejal señala que la infraestructura se encuentra en perfecto estado de conservación, aunque sí precisará de labores de recuperación el partidor móvil que también ha aparecido, ya que se encontraba más deteriorado. En esta línea, explica que “la acequia de Candalix es un ramal de la Acequia Mayor del Pantano, que se soterró en el siglo XIX por las obras del ferrocarril en Elche, pero, hasta ahora, no había ninguna referencia documental del “tallamar”, por lo que se cree que puede ser una derivación de riego del brazal dels Horts”.
Ante este escenario, el responsable municipal de Patrimonio Cultural incide en que “este hallazgo va a suponer un reto, porque el objetivo es encontrar documentación de este tipo de infraestructuras y del uso del agua”. En principio, la idea es que la acequia quede descubierta en todo el tramo que discurre por el Parque Municipal, salvo a su paso por el pequeño acceso que se habilitará en esta zona que se ha ganado, lo que supondrá que queden abiertos unos 200 metros, según el concejal. De momento, los trabajos de los últimos días ya han descubierto la parte que llega hasta la antigua entrada del Parque Municipal.
Además, se mantendrá una pequeña lámina de agua en la canalización, que prácticamente ya no estaba en uso, aunque, en su momento llegó a suministrar caudal a lo que hoy es el Parque Deportivo Emilio Villanueva, se instalarán carteles explicativos sobre el sistema de riego de los huertos, y se plantarán rosales y chopos ilicitanos en ese entorno.
Al tiempo que técnicos municipales trabajan en la acequia, desde Aigües d’Elx, que es quien asume el coste de las obras, también han comenzado ya con las labores en la zona en la que se emplazará la antigua fuente de la Glorieta, que en los últimos años había estado en la plaza de las Corales, al final del Paseo de la Estación. Así, por un lado, ya se ha empezado con las obras de preparación del terreno, mientras se reconstruyen las copas de la fuente.
El gerente de la empresa mixta Aigües d’Elx, Francisco Sáez, detalla que “las copas estaban destrozadas y el molde original no apareció, por lo que tuvimos que buscar a un artesano que elaborara la primera copa a mano para que, sobre pieza, se fueran fundiendo todas exactamente igual, y con el mismo color”. Es más, en los últimos días ya hay en el recinto dos copas de las nuevas que se han hecho para la nueva fuente, que recuperará su figura ovalada, tal y como estaba antiguamente en la Glorieta.
Tras los imprevistos surgidos en los últimos meses, el concejal de Patrimonio Cultural no se atreve a dar más plazos, aunque reconoce que “esperamos que todo esté acabado en cuestión de meses”. No en vano, desde Aigües d’Elx confían en que al menos la fuente pueda estar completada de cara al próximo mes de mayo.
