La empresa mixta Aigües d’Elx ha comenzado desde hace unas semanas a aplicar tratamientos intensivos de desratización y desinsectación en la red municipal de alcantarillado. De momento, ya está prácticamente completada la fumigación en los barrios de Carrús y Porfirio Pascual, y, a partir de ahí, se continuará por el entorno de la plaza de Crevillent, con el objetivo de que, de cara al mes de septiembre, esté cubierto todo el término municipal.
Desde Aigües d’Elx, indican que “uno de los tipos de mantenimiento imprescindibles que se realizan sobre los sistemas de alcantarillado es el control de la infestación existente en las redes de saneamiento en cuanto a ratas, cucarachas o mosquitos, que se encuentran en las canalizaciones debido a que existen unas condiciones de temperatura y humedad óptimas para su reproducción, y también la materia orgánica necesaria para su desarrollo”. Por ello, inciden en la necesidad de aplicar tratamientos de desinsectación y desratización sobre toda la red municipal de saneamiento, tanto en el casco urbano como en las pedanías.
Ante este escenario, y para hacer frente a las plagas, en función de la época del año, se alternan los tratamientos intensivos con los específicos. En este sentido, desde la empresa mixta detallan que “en el tratamiento intensivo se aplican productos de desinsectación y desratización sobre todos los pozos de la red de alcantarillado y, para ello, se toma la estadística de nivel de infestación detectada”. Mientras, en los específicos, como concretan desde la compañía, “se realiza una inspección visual de los registros de la red de alcantarillado y, posteriormente, se administran los productos de desinsectación y desratización sobre aquellas zonas donde se ha localizado durante la inspección un alto nivel de infestación”.
Estas revisiones periódicas, además, permiten comprobar los resultados del plan entre campaña y campaña, lo que explica que en los tratamientos intensivos se tome como referencia la estadística del nivel de afectación registrada.
Paralelamente, según afirman desde la empresa, a lo largo de todo el año se aplican tratamientos específicos en las calles en las que se reciben avisos de los vecinos de la presencia de roedores, cucarachas o mosquitos.
Fuentes de Aigües d’Elx apuntan que “la distribución de los tratamientos a lo largo del año se realiza en función de la capacidad de reproducción que poseen los roedores y los insectos, algo que viene marcado por las condiciones meteorológicas a lo largo de las diferentes estaciones”. Así las cosas, en primavera y verano, como consecuencia de las altas temperaturas, se impulsan campañas intensivas de desinsectación, mientras que en otoño e invierno se apuesta por las específicas para mantener en niveles mínimos la presencia de los insectos en la red de alcantarillado.
Por lo que respecta a la desratización, los diferentes tratamientos que se desarrollan a lo largo del año son todos intensivos. “En este caso, la puesta de cebos se realiza siempre por toda la red de alcantarillado, cada tres o cuatro pozos, ya que los roedores realizan desplazamientos largos a través de la red de saneamiento, y, de esta forma, acaban pasando por los cebos”, según puntualizan desde la empresa mixta Aigües d’Elx.
